Coordinar varias personas en tiempos de Covid para aprovechar el talento de todas ellas en la gestión de la Prevención de Riesgos Laborales.
El Covid ha acelerado el entorno VUCA —en el que ya estábamos en 2019—, aunque ahora, en 2020, se han añadido algunas condiciones excepcionales en la gestión:
- La distancia social.
- La entrega de mascarillas, como un EPI indispensable.
- La evaluación de riesgos en el teletrabajo.
- Comunicación rápida y eficaz.
- Uso de tecnología móvil para no depender de un ordenador fijo.
Pero los principales condicionantes de la gestión de la prevención para la empresa, continúan siendo muy desconocidos en algunos casos.
Por un lado, las obligaciones legales de contratar un servicio de prevención ajeno (SPA), han hecho que todos los empresarios hayan contratado un SPA. Además, estos servicios han realizado su labor con técnicos superiores de prevención hasta analizar todos los posibles riesgos y asegurar que el servicio de prevención ha informado de todos ellos a la empresa.
Es común encontrar evaluaciones de riesgos de páginas y páginas, con un amplísimo abanico de posibles riesgos y acciones que son difíciles de gestionar por el receptor de estos documentos.
Y aquí estamos, con la pelota de nuevo en el tejado del empresario, ya que de nuevo tiene la responsabilidad de implantar las acciones que la evaluación de riesgos ha identificado por parte del técnico de prevención del SPA.
En este punto, el empresario con frecuencia cree haber cumplido sus obligaciones legales pero, lejos de ello, ha pagado por un documento que le apunta en la responsabilidad de implantar muchísimas acciones definidas por el SPA.
Ésta es la gran asignatura pendiente de la gestión de prevención de riesgos en PIMEs. Erróneamente, se cree que es suficiente la atención en la vigilancia de la salud, la investigación de accidentes, la entrega de EPIs y la formación e información; con un esfuerzo administrativo muy elevado para la gestión de todas estas informaciones, dicho sea de paso.
Desde ONLEAN, nos ponemos en el lugar del empresario para dotarle de una herramienta que le gestione las acciones prioritarias para reducir el nivel de riesgo más alto, informe del registro de todas las entregas de EPIs, de las formaciones informaciones, de las investigaciones de accidentes, de las acciones derivadas de ellas, la Coordinación de Actividades Empresariales (CAE) o las acciones de los que no respetan las reglas de seguridad en la empresa.
La app SAFETY cierra el círculo de la responsabilidad del empresario, desde la elaboración de la evaluación de riesgos, la implantación de las acciones, los registros de la gestión del sistema de prevención hasta la demostración de todas estas buenas prácticas en la gestión de la prevención.
Nada de esto cambia con el Covid, pero lo hace mucho más difícil. Por eso creemos que ONLEAN puede ofrecer un producto que responda a una necesidad anterior al Covid (a.C) para ser aplicada en la era post-Covid (p.C).
Puedes consultar su web para más información:
También os recomendamos la entrevista que les hicieron en Radio Sant Boi: